Fui a Senegal y…

…a Cuba, Suiza, Brasil, India, Arabia Saudita, entre otros.

No hablo de un invento extraordinario que transporta a los cuerpos humanos de un lado a otro ni pretendo llamarme Phileas Fogg. ¡No! Te digo que no di la vuelta al mundo en ochenta días sino que visité América del Sur, Asia, Europa y Oceanía en un chasquido.

Ponte cómodo… ¡prepárate para leer!

Lovely colors

¡Sí! Fui la visitante número 1,234,928 de la Feria de las Culturas Amigas. Antes de que juzgues esta entrada como un “lugar común”, me gustaría que discutiéramos sobre el objeto de la existencia de esta muestra cultural. ¡Eso! Es una muestra cultural, “una ventana a la diversidad cultural del mundo en el corazón de la Ciudad de México”, de acuerdo al eslogan oficial. ¿Qué tienes en mente? Es, quizás para muchos, una edición más, un desvío de recursos, una molesta mancha en el Zócalo, ¿qué es?

Considero que la FCA tiene diversos puntos a favor para continuar con su realización. Al visitar algunos stands, logré “empalmar” que todos los individuos somos meras réplicas, es decir, estamos situados en coordenadas distintas. Tenemos los mismos hábitos y conductas. La feria tiene el alcance de mostrar, de manera experimental, las coincidencias y diferencias de los seres humanos en diferentes ubicaciones del mundo. Asimismo, ofrece sentimientos de autorrealización –tomando en cuenta la teoría de Abraham Maslow– para un número extenso de gente de diversos estratos sociales. Algunos para recordar, otros para conocer y pocos más para alardear, todos acudimos para experimentar qué hay más allá de nuestra vista.

Feria de las Culturas Amigas 2014

Costear viajes a diestra y siniestra resulta complicado, sin embargo, este tipo de escenarios nos posibilitan la interacción con diferentes identidades. Quizás no tengamos la posibilidad de conocer Argelia o quizás sí. Mientras nuestras finanzas deciden por nosotros, acá le damos la vuelta visitando y soñando con Palestina e Irán.

He de afirmar que este tipo de “manifestaciones culturales” fortalecen los estereotipos pero si no fuera así, ¿qué se expondría? Imagino un stand de México en Rusia. ¡Claro! Rasgos típicos, naturalmente, es nuestra identidad: cultura = tradiciones y costumbres. “Basta de palabrerías, al grano”. Visité América del Sur*, alimentos muy similares entre sí. Algunos países no me resultan tan lejanos porque el Distrito Federal es tan cosmopolita que podemos encontrar comida uruguaya, chilena, colombiana, brasileña y hasta paraguaya. Europa**, resultó ser sencilla y atascada. A mi parecer, muchos alimentos/bebidas las puedes encontrar en supermercados o áreas gourmet. Quizás la influencia europea está más cerca de nosotros.

Britain in Mexico

Asia***: entre China, Japón e India, propongo te dirijas a los menos populares. ¿Qué tal Sri Lanka o Laos? No pierdas tu tiempo en lo que tenemos aquí. África y Oceanía son “poco visitados”, sin embargo, tienen artículos típicos.

Amazing performance – Eurasia
Wanna try?

*No olvides visitar el stand de Chile, República Dominicana y Brasil. Degusta e imprégnate de los ritmos caribeños/latinos.

**Prueba los waffles de Bélgica, una –valorada– St. Pellegrino con crepa y no olvides una cerveza de barril de algún lugar de Europa Oriental.

***Compra agua de moras y evalúa precios de los artículos.

Al final, lo valioso de esta muestra son los alimentos y bebidas. La posibilidad de degustar un Ajiaco preparado por nativos, resulta interesante. Dudaría fuertemente en comprar alguno de los artículos que venden ahí. ¿Pagar $2,500.00 por una pashmina proveniente de Rusia? Are you kiddin’ me? Me parece exhorbitante. Recuerden Embajadas… el target al cual se dirigen, podría no adquirir algo tan costoso. Nuevamente, lo que nos une a todos: la comida.

Sugiero la visites, es una oportunidad que no deberías dejar pasar. Si has estado posponiendo tu –tan anhelado– viaje a Egipto porque tienes miedo de regresar sin esposa, no lo dudes más… Visita el stand 85.

La muestra no es apta para personas que:

• Se ‘engentan’ rápidamente.
• Están obsesionadas con la limpieza.
• Han recorrido el mundo.

Seguramente hay mucho que falta y –probablemente– no todo lo exhibido típico pero… come on!

P.D.

¿Qué crees? ¡Por fin pude comer un lángos! Se me hizo. Al menos no me sentí decepcionada; no esta vez.

Lángos – Hungarian food specialty – Finally… got mine!